6.11.06

27-I-1999

¿Todavía preguntas por qué fumo?
Permíteme que a tu cuestión responda,
pues es de todas mi afición tan honda
que a dicho vicio considero sumo.

Dices que los ojos te nubla el humo,
que cual mosca por todas partes ronda.
Si así ocurre me retiro a mi fonda
y presuroso sin pausa me esfumo.

Ya el corto cilindro se desvanece
víctima del despiadado cerillo;
me apena tanto ver cómo perece,

tornándose en triste y cruel amarillo,
que así de pronto otra vez me apetece
que me apetezca ya otro cigarrillo.

3 Comments:

Anonymous Anónimo opinó...

Nos fumamos uno a pachas?

11:38 a. m.  
Blogger Ale opinó...

hola! cuando tenga un rato te explico lo de poner todos los post en una página. Ahora me voy a fumar un cigarrito y a descansar un rato. Bonito blog!

10:15 p. m.  
Anonymous Anónimo opinó...

¿Que por qué no fumo? Pues porque me gusta ser libre y el tabaco no me dejaba. No me gusta estar atada a nada que no me dé amor y buenas energías. El tabaco me tenía sumida en una jaula, como un pájaro encarcelado, no me dejaba desplegar mis alas y poder volar adonde yo quisiera, siempre estaba ahí para recodarme que primero tenía que fumarle. Así que decidí ser libre, y ahora me siento mejor. Prefiero no ser dominado, lo cual no significa que prefiero dominar porque no me gusta esa palabra en realidad, por eso fumo cuando realmente me apetece, es decir, casi nunca. Es cuestión de prioridades.

11:54 p. m.  

Publicar un comentario

<< Home